miércoles, 13 de agosto de 2008

qué ves cuando me ves?

Nada en este mundo es un regalo.
Lo que ha de aprenderse debe aprenderse arduamente
C.Castaneda.



Uno de los desafíos más difíciles de estos tiempos tal vez sea el de poder ver al otro como tal, esto es, como una persona en sí misma. Parece fácil y obvio, pero no lo es tanto.

Como solemos mandar a la papelera de reciclaje todo aquello que no nos gusta de nosotros mismos - justamente por eso,porque no nos gusta- es muy probable que encontremos algún otro/a ser en donde "colgar"todos esos aspectos que rechazamos.

Además, nunca faltan buenas perchas...

Uno de los pasos más importantes en la evolución de nuestra conciencia,en nuestro crecimiento es poder "replegarnos", traer hacia nosotros mismos lo que nos pertenece y hacernos cargo de aquello que le estamos depositando, más especificamente proyectando al otro. No sólo de aquello que rechazamos,sino también -por qué no- de los aspectos más sublimes y divinos.

Nadie se exime de la tendencia de querer "acomodar"al otro según sus propios parámetros internos, por eso tantas veces nos enojamos, simplemente porque ese novio,esa novia,este hijo ó hija, estos padres, esposos,mujeres, jefes,amigos....no se parecen a veces a la IDEA que tenemos de ellos.

Es más, si hasta nosotros mismos no nos parecemos en nada ,muchas pero muchas veces, a la idea que tenemos de cómo deberíamos ser!!

Les comparto un texto de una autora canadiense, se llama Marion Woodman, de su libro "la doncella rey", cuando después de muchos años logra ver a su marido y no la idea que de él tenia.

"...yo reconocí el misterio divino que nos revela a nosotros mismos y el uno al otro en mi propio matrimonio, cuando, después de veinticinco años, me levanté de mi butaca en la que estaba disfrutando de un café matinal y vi, por primera vez, a mi marido sin ninguna proyección arquetípica. Él estaba en pie en la cocina. Era un hombre enfundado en una vieja y sencilla bata casera negra a cuadros, por debajo de la cual asomaban dos larguiruchas piernas. Estaba intentando romper un huevo en un delgado escalfador de huevos. "yo podría hacerlo mejor"- pensé- "mucho mejor". Mientras yo musitaba este pensamiento, el hombre puso su mano en una barra de pan,agarró un cuchillo y ante mi era un ser humano concentrado en alimentarse. "Esta es la mano que conozco tan bien , la mano que planta tulipanes, teclea a máquina, me hace el amor. Le he hecho atravesar el infierno, me ha hecho atravesar el infierno. Y aquí estamos en la decimoséptima planta de un edificio de pisos en Toronto con un mundo esquizofrénico afuera y un atroz desorden en la cocina. Y aquí estamos todavía juntos. Él recorre su camino con el mayor valor que puede, yo estoy recorriendo el mío lo más honradamente que puedo. De repente me inundó una ola de amor. Amaba a ese ser humano que era tan totalmente diferente de mi novio interior, tan total y gloriosamente humano. "Quieres más café, Marion?""si",respondí..."


Entonces cabe la pregunta..QuE VeS CUaNdO Te VeS?


cariños!!