domingo, 10 de enero de 2010

es UN MÚSCULO SANO?

Hace rato vengo pensando en escribir acerca de este tema, y es tan vasto, tan extenso, tan profundo que termino por verlo inabarcable.
Muchos autores tocan sus aristas, entran por sus puertas,sus ventanas y su chimenea desde todos los tiempos...parece que el tema ahora se torna casi inexorable porque capaz sea una de las opciones para encarar el momento tan tremendo de la humanidad y el planeta :
L A A P E R T U R A D E L C O R A Z Ó N
En algún post ya hice referencia a Castaneda: este camino,tiene corazón?
Hoy quiero abocarme al camino del corazón de las relaciones humanas.
Vemos vínculos, armamos relaciones, experimentamos vivencias...hasta donde la coraza que armamos para recubrir y proteger a ese órgano (músculo?) tan blando y vulnerable nos permita.
La amenaza y el temor de sentirnos lastimados -que podemos claro denominar miedo- nos tira una y otra vez para atrás, nos empuja a ese lugar conocido pero no por eso más armonioso ni mejor. Y de tanto ejercitar ese mecanismo, se torna un hábito.

Todo comenzó cuando fuimos pequeños...? sin duda, como casi todo...
Si, ahí , en ese justo lugar , en ese preciso tiempo es donde podemos encontrar los recursos para justificar nuestra cerrazón, tal vez para victimizarnos . También desde ahi seguramente encontremos la fuerza para liberarnos.

Qué hacer con el miedo? Ya había yo escuchado que donde hay miedo no hay amor. Y no me refiero únicamente a las relaciones de pareja.
En qué nos convierte el miedo?

Ana tenía muchos amigos, y en especial solía divertirse particularmente con un grupo de mujeres, con ella eran 5. Se juntaban preferentemente los miércoles por la noche,tomaban vino,comían rico y disfrutaban de compartir sus aventuras y todo lo referente a sus hijos y sus parejas.
Un día sucedió que se reunieron sin ella,- no importa demasiado ahora la razón verdadera- y ella se sintió "fuera" pero no dijo nada, probablemente se criticaba los sentimientos de celos y se avergonzaba, o tal vez , y por qué no además, no se terminaba de dar cuenta del todo de qué le pasaba.
Lo que no se percató, es que con su silencio y sus fantasías en relación a su posible exclusión ella misma se iba distanciando y quedando más sola.
Hubo más encuentros, en algunos no participó ( siguio sin enterarse!) y cada vez que concurría a alguna reunión se iba sintiendo más incómoda y afuera, por enterarse de vivencias y actividades pasadas en las que no había estado. No obstante, continuaba su silencio. La tensión aumentaba.
Digamos que el silencio era externo, porque internamente en su cabeza rebotaban pensamientos tales como : no me quieren , no me eligen, no valgo, soy rechazada, y rápidamente pasaba a otros tales como : no les da, son envidiosas, me tienen celos, me excluyen porque...

La distancia ya era grande. El enojo, frustración y malestar por lo que ella imaginaba que sucedía la invadían y a cambio recubrió su corazón de una coraza dura, firme, fria, mostrándose ante ellas como en un estado de superación, en el que "ese tipo de vínculos ya no le importaba más" ( "no me dolió "dicen algunos niños...!)

La distancia, la lejanía, la cerrazón...el desamor.
En ese tiempo de alejamiento murió su padre, y se separó de su pareja. Golpe duro al corazón.
(coraza viene de corazón?)
Soñó que daba un exámen, y ante un tribunal de docentes explicaba que "un maestro es aquel que se abre el corazón"
Pasó más de un año, y después de revisar y trabajar arduamente sobre sí misma, de atravesar el dolor y sufrimiento, de revisar sus defensas, sus mecanismos reactivos, su temor al rechazo, su miedo al abandono...tomó coraje y llamó a sus amigas. Sólo para explicar que no le daba lo mismo andar por la vida sin ellas , que dió la imagen de una que no es, que defensiva e inconscientemente...mintió.

Y como casi todo camino que se transita desde el corazón, ahi estaban sus amigas esperándola.
La alegría del encuentro en la intimidad, en la confianza de poder vincularse sin muros, con la verdad, en lo genuino del encuentro...desde lo blandito de la emoción.

Dice John Welwood: "...la apertura del corazón es la fuerza transmutadora de la alquimia del amor que nos permite ver la bondad incondicional de las personas mas allá de las limitaciones de su yo. La apertura del corazón nos ayuda a recuperar la belleza que se halla oculta en la bestia y a comprender la profunda relación existente entre los aspectos condicionado e incondicional de nuestra naturaleza. El desbordamiento del corazón roto y abierto empieza con la bondad hacia nosotros mismos y luego irradia en forma de compasión hacia todos los seres que ocultan su ternura por miedo a ser heridos y que necesitan de nuestro amor incondicional para despertar su corazón..."

Ya podemos empezar a sospechar de las manifestaciones de enojo y desamor de muchas personas, incluyéndonos , claro. Y podemos empezar por nosotros mismos, por abrirnos a nosotros mismos, sin juicios.

un cariño de verano de este lado del planeta.
Inés.

continuará...!
gracias Calamaro por prestarnos tu letra.